“El señor Assange fue acusado de conducta criminal muy grave en Estados Unidos en relación con su presunto papel en uno de las mayores filtraciones de información confidencial en la historia de nuestro país”, dijo el Secretario de Estado, Antony Blinken, desde Australia.
Por Rod McGuirk
CANBERRA, Australia (AP) — El Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, respondió el sábado a las demandas australianas de que se ponga fin a la persecución del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, afirmando que el ciudadano australiano fue acusado de “conducta delictiva muy grave” al publicar un conjunto de documentos confidenciales hace más de una década.
El Gobierno del Partido Laborista australiano, de centroizquierda, ha defendido desde que ganó las elecciones el año pasado que Estados Unidos debe poner fin a su persecución del periodista de 52 años, que ha pasado cuatro años en una prisión británica luchando contra su extradición a Estados Unidos.
La libertad de Assange se considera una prueba para la influencia de Australia sobre el Gobierno del Presidente estadounidense Joe Biden.
Blinken confirmó el sábado que se había hablado de Assange en las conversaciones anuales con la ministra de Asuntos Exteriores, Penny Wong, en Brisbane, Australia.
“Entiendo las preocupaciones y opiniones de los australianos. Creo que es muy importante que nuestros amigos de aquí entiendan nuestras preocupaciones sobre este asunto”, dijo Blinken a los periodistas.
“El señor Assange fue acusado de conducta criminal muy grave en Estados Unidos en relación con su presunto papel en uno de las mayores filtraciones de información confidencial en la historia de nuestro país”, añadió.
Wong dijo que el procesamiento de Assange se había “alargado demasiado” y que Australia quería que los cargos “llegaran a una conclusión”.
Australia mantiene la ambigüedad sobre si Estados Unidos debe abandonar la acusación o llegar a un acuerdo.
Assange se enfrenta a 17 cargos de espionaje y uno de uso indebido de ordenadores por la publicación por parte de WikiLeaks de cientos de miles de documentos diplomáticos y militares confidenciales en 2010.
Los fiscales estadounidenses alegan que ayudó a la analista de inteligencia del ejército estadounidense Chelsea Manning a robar cables diplomáticos y archivos militares clasificados que WikiLeaks publicó posteriormente, poniendo vidas en peligro.
Australia argumenta que existe una “desconexión” entre el trato dado por Estados Unidos a Assange y a Manning. El entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama, conmutó la pena de 35 años de Manning por siete años, lo que permitió su liberación en 2017.